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Mostrando las entradas etiquetadas como literatura rural chilena

Constanza Belén Oyarzún Morales

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¿Por qué la vida es así de injusta? Muchas veces yo me pregunto por qué mi vida es tan agradable, sin ninguna dificultad. Mi familia es de una clase socioeconómica muy alta, mi mamá es una persona egoísta que solo piensa en ella, a veces yo creo que ella necesita ayuda psicológica, porque todo lo que ella piensa se basa en ella, compras y muchos viajes. A veces me gustaría que ella fuese como son todas las madres, es decir que se preocupan por sus hijos si les pasa algo, en la parte emocional como en la salud, pero lamentablemente mi madre no es una madre preocupada por mí. Mi papá es ese tipo de hombre trabajador que nunca pasa en la casa porque según él quiere lo mejor para mi madre y para mí. Yo encuentro que lo principal en la vida de un ser humano no es el dinero, lo más importante es tener el cariño familiar que sólo tus padres te pueden dar. En la casa cuando mis padres no están yo me quedo con los empleados de la casa, ellos parecen una verdadera familia porque siempre están pr...

Jorge Pérez Ruz

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El potrillo salvaje Había una vez un potrillo que era muy salvaje que lo habían encontrado en la carretera de la fruta. Un día fui con mi abuelito a vender melones al mercado de Rancagua, como nosotros llevamos pocos melones, no íbamos tan cargados. Cuando íbamos a mitad de camino nos encontramos un potrillo abandonado, nos bajamos y le pusimos una frazada encima, lo tapamos muy bien y lo llevamos a la casa. Pasaron los días y le hicimos una pesebrera para que allí durmiera el potrillo. Él era muy salvaje y no le gustaba que le hicieran cariño, lo que más le gustaba era correr y saltar. Un día fui a darle comida y vi que estaba muy triste porque se sentía muy solo, le faltaba amor de mamá. Ese día lo vi tan triste que me dieron ganas de llorar, fui hacia allá y me senté a su lado, le di leche en su mamadera y se durmió hasta el otro día. Al día siguiente en la mañana desperté, lo fui a ver y no estaba. Yo estaba muy preocupado, no sabía qué hacer, llame a los carabineros. Como había do...

Isidora Magdalena Azúa Lizana

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El deseo eterno Los años pasan pero jamás olvidaré este día, o mejor dicho estos meses, este año en especial. Mi deseo más grande era tener un hermano que ahuyentara mis momentos de aburrimiento, calmara mi temor y me acompañara hasta el resto de mi vida. Sin embargo ese deseo parecía inalcanzable ya que año a año se hacía eterno sin esa personita a mi lado. Mis 6, mis 7, mis 8, mis 9, mis 10 y finalmente mis 11, mis dulces 11 años. Jamás pensé que este año se cumpliría mi deseo eterno y tampoco me imaginé que iba a ocurrir la pesadilla más maldita de mi vida ... ahora iré al grano, comenzaré a relatar lo ocurrido comenzando del principio del 2011 y un poquito del 2010. Mayo 2010: a cada paso una hoja caída de los árboles. Iba de regreso a casa tras un extenso día de estudios, agotada y casi sin ánimos abrí la puerta de mi casa, tiré la mochila y me senté en el sillón. Mi mamá me aguardaba sonriente y me dijo: tendrás un hermano o una hermana. Con esa frase recuperé los ánimos y empecé...