Me llamó Boris Pasternak - Antonio Costa Gómez

foto: Consuelo de Arco Me llamó Boris Pasternak, me dijo: “Acuérdate de cuando escribí en 1917, en medio de la guerra mundial “Mi hermana la vida”. Hablaba de la actividad de los trenes, de como se movía todo el mundo a pesar de todo, de como empezaba la primavera. Y escribí: “La vida, mi hermana. Aquí la ves que ella explota/ y se desfleca en lluvia, en llantos, en bofetadas de primavera”. Y sentí la energía. Mordí la vida con gracia”. Pasternak me dijo: “Los ancianos se agarran más la vida, la abrazan con fuerza, la beben en cucharadas profundas. Igual que tu abuela de Tortosa poco antes de morir cuando le ponían la sopa de cena decía: “Me sabe a poco”. Le sabía a poco la vida. Los viejos saben lo que vale, han pasado mil cosas, los han amenazado tantas plagas, han renacido tantas veces. Pórtate como un viejo. Los jóvenes se po...